Caral
Caral es el sitio central de las investigaciones, el punto desde donde se irradian las acciones arqueológicas y luego turísticas, sociales, estructurales. Las pirámides de 5,000 años de antiguedad no son cualquier cosa, sin embargo nuestra intención es este viaje no es precisamente el arqueológico, sino el de apreciar todo el entorno de esta civilización a través del transporte más humano: la bicicleta.
En el valle de Supe, los poblados no están en la carretera, están al lado izquierdo del valle y por eso elegimos ese camino. La ruta por cierto es netamente costera, saliendo de las verdes productivas chacras (campos agrícolas), por caminos entre maíces y demás hierbas, y se va, subiendo poco a poco, salir temprano con clima fresco reduce el desgaste físico.
En el camino de casi 30Kms de subida, aparecen restos arqueológicos, y cada poblado tiene el suyo, algunos aún como un montón de tierra sin descubrir y otros en proceso de limpieza e investigación, las más trabajadas en ese camino, las de Era de Pando, inmensas, impresionantes, inclusive hay unas ruinas Incas llamadas Pueblo Nuevo, mientras que al otro lado del valle, hay más complejos piramidales.
Eso sí, consideren tomar un buen desayuno y llevar al menos un par de litros de agua y algo para comer en la ruta, un par de cámaras para los pinchazos y parches por si se sacan la lotería. La ruta no es nada técnica pero requiere un mediano entrenamiento.
Si quieren conocer de verdad el valle de las pirámides, hagánlo en bicicleta.